Hoy el mundo vive otro Viernes 13, un día que despierta tanto o más terror que el mismo Martes 13. La superstición que genera en el calendario provoca que las personas estén más atentas a las calamidades como terremotos, asesinatos, desastres o cualquier otro accidente para acreditárselo rápidamente a la mala suerte que encierra esta fecha.
Sin embargo, habrá quien se pregunte, ¿de dónde viene tanto temor hacia este día? Pues aunque no esté claro, como cualquier otra superstición, esta encierra motivos religiosos.
Muchos cristianos consideran que la mala suerte que trae consigo esta fecha se originó el viernes 13 de octubre de 1307, cuando, por orden de Felipe IV fueron asesinados un grupo de caballero templarios que acabó con esta orden. Sin embargo, el primero en jerarquía de esta orden, el Gran Maestre Jacques de Molay maldijo al papa Clemente y al Rey Felipe IV diciendo que en menos de un año ambos morirían, cosa que sucedió en unos cuantos meses
Esto se suma una serie de desgracias que a lo largo de la historia ocurrieron un Viernes 13, como La Tragedia de los Andes en 1972, cuando un avión uruguayo se estrelló en la cordillera de los Andes y los tripulantes después de semanas en el lugar tomaron la decisión de comerse a los compañeros muertos.
Entre otras también están los Incendios del Viernes Negro en Australia donde decenas de personas perdieron la vida; El Hundimiento de la Costa Concordia en 2012 cuando un crucero chocó contra la costa de Italia; El Atentado a París en 2015 cuando el Estado Islámico organizó ataques que dejaron a más de 130 fallecidos.
Estas son un algunas de las tragedias que remarcan el temor que encierra el viernes negro, una fecha de superstición y desencanto.
Buzón de Noticias