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Si bien es cierto, es muy difícil determinar cuál pueda ser la especie más rara del mundo, si de animales se refiere, siempre se puede hacer un listado de quienes se creen son los más llamativos

Todos los animales poseen rasgos que son curiosos a la vista del hombre. Sin embargo, de las más de 500 millones de especies que datan haber existido en la tierra, el humano no conoce si quiera la mitad de todas ellas.

Es imprescindible tener claro que tras miles de años han ido apareciendo nuevas especies, quizás estuvieron con nosotros desde hace muchos años, o quizás solamente se debió a una mutación entre animales. Lo cierto es que hoy en día son nuestros acompañantes en el planeta y para no asustarse es preferible conocerlos por si algún día te llegar a topar con ellos.

Interesantemente, la mayoría de los animales de los que menos tenemos conocimientos y suelen sorprendernos provienen del mundo acuático. ¿Por qué? Pues aún no se sabe cuáles serán todas aquellas criaturas que residan en lo más profundo de mares y océanos.

He aquí los 10 animales de mayor rareza.

Pez Pacu

Originario del Amazonas, Los ejemplares adultos pueden llegar a los 90cm y pesar cerca de 25 kilos. Se trata de un pez muy apreciado por su sabor, razón por la cual se ha introducido en otras partes del mundo. Además de por sus cualidades gastronómicas, sin embargo, esta especie se ha hecho famosa por el increíble parecido frontal de su dentadura con la de los seres humanos. Todavía más sorprendente, sin embargo, es su afición por morder los testículos de los bañistas e incluso en Papúa Nueva Guinea es conocido como ´el corta-bolas´ por su capacidad para castrar a los incautos que se cruzan en su camino.

Murciélago Yoda

Se trata de una especie endémica de Papúa Nueva Guinea que mide unos 40 cm, aunque al abrir sus alas puede llegar una envergadura de hasta 1,5 metros. Aunque su nombre científico es Nyctimene papuanus, se le conoce como murciélago yoda por su parecido con el personaje de Yoda de la Guerra de las Galaxias. No fue descubierto hasta 2009 gracias a una expedición de científicos norteamericanos.

Topo de nariz estrellada

Conocido científicamente como Condylura cristata, se trata de una especie de mamífero soricomorfo que se puede encontrar en el continente norteamericano, especialmente en la costa nordeste de Estados Unidos. Los adultos miden de 15 a 20 cm de longitud, pesan 56 g, y poseen 44 dientes. El carácter distintivo de esta especie es la presencia de 22 tentáculos rosados, móviles y flexibles al final del hocico. Dichas prolongaciones poseen una gran sensibilidad táctil; tanto en la oscuridad como fuera de ella son esenciales en la captura de gusanos, insectos y crustáceos.

Pez Diablo

Su nombre científico es Hydrolycus scomberoides, aunque en realidad es más conocido como el pez diablo. Razones no le faltan para llevar este nombre, tal y como se puede observar en la poderosa dentadura y sus descomunales y afilados dientes. Se trata de un pez que vive en aguas dulces y habita en climas tropicales. Se le puede encontrar en la cuenca del Amazonas y puede llegar a medir hasta 117 cm, con un peso algo inferior a los 20 kilos.

Pez Mancha

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Con el nombre científico de Psychrolutes microporos esta es una de las especies descubiertas más raras y desconocidas. Vive en aguas muy profundas, por lo que su localización es extremadamente difícil. Su hábitat son las aguas de Nueva Zelanda y el este de Australia. Su carne es fundamentalmente una masa gelatinosa con una densidad un poco menor que la del agua, lo que les permite flotar por encima del fondo marino sin prácticamente gastar energía.

Ornitorrinco

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Estos mamíferos son considerados por tener una posible mutuación con otros individuos pues estos poseen una cola de castor, pico de pato y patas con cuerpo de nutria. Por si fuera poco, los machos suelen ser venenosos, lo suficiente para matar a sus presas pero no como para acabar con la vida de un humano.  Su nombre científico es Ornithorhynchus anatinus y suele vivir en el oeste de Australia e Isla Tazmania.

Ajolote

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Se trata de un amfibio oriundo de México y cuyo hábitat natural se limita exclusivamente a los lagos próximos a la Ciudad de México. La introducción de especies no autóctonas y sobre todo su explotación desmedida ha provocado que se encuentre en peligro de extinción. Su captura intensiva ha sido provocada por la creencia de que tiene propiedades para tratar enfermedades respiratorias, lo que ha hecho que en la medicina tradicional mexicana se elaboren jarabes a partir de ajolote.

Cangrejo de los Cocoteros

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Pese a su apariencia, el llamado Birgus latro es una especie animal absolutamente inofensiva. Se trata de una especie de cangrejo ermitaño cuya principal habilidad es abrir cocos, gracias a sus poderosas pinzas, para alimentarse con su contenido. Otra de sus curiosas aficiones es la de robar objetos brillantes, algo que saben bien los habitantes de las zonas en las que habita, en el océano Índico y el Pacífico occidental. Puede llegar a medir cerca de medio metro y pesar más de 4 kilos.

Tiburón anguila

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También conocido como tiburón de gorgera o clámide, el Chlamydoselachus anguineus habita en los océanos Atlántico y Pacífico, habitualmente en zonas marinas profundas. En peligro de extinción por su baja tasa de reproducción, posee características prehistóricas que han motivado que algunos lo consideren un ´fósil viviente´. Puede alcanzar hasta 4 metros de longitud y se caracteriza por capturar a sus presas doblando su cuerpo y lanzándose hacia adelante como una serpiente.

Aye-aye

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Aunque por su aspecto pueda ser confundido con una especie de gremlin, lo cierto es que esta especie, conocida científicamente como Daubentonia madagascarensis, no tiene nada de la naturaleza maléfica de los personajes mitológicos. Pese a ello, en la cultura popular de Madagascar, donde habita, se dice que si el aye-aye apunta a una persona con su dedo intermedio –más largo y delgado que el resto- ésta morirá de forma repentina. Este primate estrepsirrino, emparentado con los lémures, es una especie amenazada de la que solo quedan unos 2.500 ejemplares.

Andrés Finol

Buzón de Noticias