¿Cuántos misterios no nos han dejado los hombres de antaño a través de la historia y que todavía no hemos descubierto? Pues en la Catedral de Santiago de Compostela, en España, fue descubierta la particular firma de un albañil con 900 años desde su creación, tomando en cuenta que fue construida a inicios del siglo XII.
Este descubrimiento lo hizo la especialista en historia de arquitectura Jennifer Alexander, quien en estos momentos analiza piedra por piedra de la catedral para determinar cómo fue construida.
Fue así como encontró la selfie tallada en la piedra, que resulta ser un autorretrato de uno de los albañiles que trabajó durante la construcción de la estructura. Según la experta, la imagen se talló para que solo pudiera verla otro albañil, y no por el público de la catedral.
A pesar de que la figura se llevó 900 años para ser encontrada, este tipo de arte era habitual que se dejara en edificios medievales y las que se conocen hasta ahora fueron descubiertas ya hace años.
“Suelen estar en rincones oscuros donde solo los encontraría otro cantero. Este se encuentra en una parte del edificio donde tendrías que ser albañil para estar allí y verlo. Está escondido entre un conjunto completo de mayúsculas (la parte superior de una columna) que por lo demás son simples”, le dijo Alexander a The Observer.
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Esta práctica la realizaban los albañiles para dejar una especie de firma o registro de su trabajo, pues acostumbraban a ser invisibilizados.
La imagen en sí muestra a un hombre colgando del centro de la capital “como si su vida dependiera de ello”. Está en medio de una fila de mayúsculas idénticas una de la otra, con el mismo patrón y molde, hasta que se encuentra la “selfie”.
“Sale de la capital y se aferra a ella. Es casi como si se lo estuviera tragando”, precisa Alexander.
Buzón de Noticias