Dakota era un adolescente de 16 años que murió a raíz de un accidente automovilístico en Estados Unidos. A pocos minutos de su muerte sus padres Stephanie Reid y John Reid, decidieron sin pensarlos dos veces donar los órganos de su hijo, entre ellos el corazón del menor.
Un año después John recibió un paquete de parte del paciente que recibió el corazón para seguir viviendo, esto a pesar de los duros protocolos que imposibilitan hallar la dirección de un donante.
Con una nota que hace sollozar al fornido hombre de cerca de 40 años, al romper la caja que le fue enviada se sorprende al ver un oso de peluche, que al presionarlo emite el sonido de unos latidos. Eran los latidos del corazón de su hijo en el pecho de otra persona.
El llanto de alegría y nostalgia no pudo ser contenido por los esposos Reid, que lloraron juntos al terminar el vídeo grabado por Stephanie. “Hubiera ido yo mismo pero no sé cuándo pueda”, concluye la nota enviada a la pareja de padres.
Luis Dagand
Buzón de Noticias
Fotografía: La Verdad
Vídeo: Diario 26