Expertos en el tema aseguran que la gestión del actual Procurador General interino, Javier Caraballo, está poniendo en jaque a la justicia panameña y esto debido a que rompe el compromiso con la independencia judicial.
Esto también provoca que se generen nuevas presiones políticas que tienden a diluir los casos y generan mayor impunidad a ese sistema.
Acerca del nombramiento del actual Fiscal General desde marzo de este año, el presidente de los abogados del Istmo, Juan Carlos Araúz, señaló al rotativo que “ningún actor de esa naturaleza puede funcionar como un interino».
Buzón de Noticias